2.12.05

no es lo que pedí!

1- aquí tienes, dijo. oye, oye! no es lo que pedí!, sentencié antes de tomar el pequeño paquete. es lo que hay, respondió, y se sumergió en otra habitación. el cortinado de cintas plásticas verdes detuvo su bailoteo y ya no pude seguir observando las extrañas figuras que se movían junto a él. me recordó la carnicería que frecuentaba cuando era chico. estaba en una esquina también. también entonces subía a una bicicleta y retornaba con un paquete. el envoltorio, no podía ser distinto: viejos diarios. es lo que hay, me dije cuando varios kilómetros después, sentí las piernas cansadas y decidí terminar el recorrido caminando. el paquete ya no estaba en el bolsillo. levanté las cejas, antes perdía el vuelto pensé sin volver la vista atrás. seguí caminando. no era lo que pedí.