12.10.05

sóngoro cosóngoro

1- los martes a la noche tienen ese no sé qué. llegamos de laburar tarde, costeleta va costeleta viene en la cena, incendiamos las últimas migajas. y el devaneo luego. una palabra trae a la otra y pone en marcha un pesado tren de insomnios. pero hubo anoche un momento en que toda la lucidez se hizo presente, vimos nítidamente los intrincados designios y desmenuzamos los dones, bifurcamos los destinos y compramos varios boletos, hablamos de la valentía y su revés, éramos toda una promesa. estuvo bueno. una pena que hoy a la mañana, aquella promesa estiró las piernas conmigo, tomó unos mates, y después me dijo: es mucho para mí, yo no salgo, te espero acá hasta el próximo martes

2 - Me diste la intemperie, la leve sombra de tu mano pasando por mi cara. Me diste el frío, la distancia, el amargo café de medianoche entre mesas vacías. Siempre empezó a llover en la mitad de la película, la flor que te llevé tenía una araña esperando entre los pétalos. Creo que lo sabías y que favoreciste la desgracia. Siempre olvidé el paraguas antes de ir a buscarte, el restaurante estaba lleno y voceaban la guerra en las esquinas (julio cortázar - poemas)